sábado, 20 de abril de 2019

LA TORRE... ¿O SERÁ OBELISCO?


Padre e hijo (father and son) caminaban por un hermoso y bien floreado sendero. Estaba cubierto, mayormente, por cayenas de variados colores. Alguien se había esmerado en embellecer el paisaje de esa manera. El Sol se encontraba marcando en los relojes que llevan su nombre la hora que indica la mañana entre el amanecer y el mediodía. Ambos se veían muy felices el uno al otro. De vez en cuando reían por alguna ocurrencia…
–Sabías, papá, –afirmó su compañero de camino– que la palabra ha permitido siempre la creación.
–¡Por supuesto! Eso te lo enseñé yo, y yo lo aprendí en el evangelio de Juan: “Todas las cosas fueron hechas por medio de la Palabra y sin ella no se hizo nada de todo lo que existe… La Palabra era la luz verdadera que, al venir a este mundo, ilumina a todo hombre.”
–Y entonces ¿por qué los hombres no se pueden entender? ¿A qué se deben tantas diferencias?
–¡Ay, mijo! Una pregunta no muy fácil de responder y a la vez hay una respuesta.
–¿Y cuál será?
–Dios así lo quiso…
–¡Papá! ¿Pero qué estás diciendo? Si los Evangélicos o los Testigos te escuchan… ¡quién los aguanta!... Y ni pensar en el cura de la iglesia: te dará un sermón personalizado…
Riendo de buenas ganas le responde: –Mira, eso no lo estoy inventando. Eso está dicho en la biblia…
–¡Cómo así?
–Te cuento: en un capítulo se puede leer que los hombres todos hablaban una misma lengua y en determinado momento, en una gran llanura decidieron construir una ciudad para establecerse (imagino que para descansar de tanto peregrinaje). Comenzaron a trabajar y para dejar su firma se propusieron levantar un obelisco muy alto…
–Ya sé de lo que me hablas, pero era una torre…
–Sí, puede ser, pero nosotros lo que sabemos nos viene de traducciones de traducciones…
–Bueno, sigue, papá, tú cuentas muy sabroso las cosas.
–Sigo, hijo: Antes, al parecer, Dios bajaba mucho a la Tierra, y esa vez, al mirar lo que hacían los hombres se sorprendió de lo hábiles e inteligentes que eran y pensó: –Si siendo un solo pueblo que se entiende, y son capaces de semejantes construcciones, nada les será imposible… mejor que no… Y fue cuando decidió ponerlos a hablar en inglés, en francés, en alemán, en español, en chino… Y no preguntes cuál era la lengua original, porque no lo sé…
–¡Y claro! –Concluyó el hijo– Al no entenderse unos con otros tuvieron que separarse y dispersarse por el mundo…
–¡Así es…!
Father and son (padre e hijo) continuaron andando y seguir felices mientras el Sol iba acortando sus sombras… para más adelante alargarlas de nuevo…


jueves, 16 de agosto de 2018

MECHE


 “… se está bañando a las orillas de un río…”
Simón Díaz

Meche habita un pueblo bastante alejado de la frontera, la que cruzó hace más de un año. Ahora es soltera, siempre lo ha sido, no le gusta estar sola. Ha hecho buenas relaciones con sus vecinos y tiene varios pretendientes, con uno de los cuales ya comienza a encariñarse.
Hoy está sentada junto a una de sus nuevas amigas bajo la sombra de unas palmeras Cera de Quindio.
–Entonces, amiga, ¿cómo es el cuento de tu escapada a estas tierras?
–Ya te lo he contado unas cuantas veces.
–Es que es muy divertido –diciendo esto y dejando ver una amplia sonrisa.
–¿Tú sabías que te estaban buceando?
–Al principio no. Cuando me di cuenta me vino un chispazo a la mente: la oportunidad de escapar de mi aburrido esposo.
–Y te resultó, ¡y muy bien...! Te he visto echándole ojitos a Pedro.
–Eso es otra cosa… Pero así es.
–Bueno, sígueme contando.
–Sigo: en la mañana salí temprano a bañarme al río...
–Pero en ese río hay caimanes.
–Sí, pero no a todo lo largo. Hay sitios seguros.
–Entiendo... ¡Aja!: te fuiste temprano a bañar al río...
–Sí. Me zambullí tal como lo hacía Eva en El Paraíso. –Y sonríe pícara–. El agua estaba deliciosa. Salía, me zambullía, nadaba... me estaba deleitando un mundo.
–¡Qué envidia!
Innegable que Meche también se divertía, aunque más viendo a su amiga que contando la historia.
— o —
Sabana es un pueblo bordeado por el río que le dio su nombre, igual a él es tranquilo y extenso. Situado al sur de un estado llanero y a considerable distancia de la frontera con los países vecinos debe su auge económico a la cría de ganados lecheros y sementales.
Cerca de una de las más prósperas haciendas está la casa que ocuparan Simón y su concubina... Hoy está solitaria... Bueno, dentro están dos hombres que beben y hablan sobre cualquier cosa: el uno de su tristeza, su dolor, y el otro... Este...
Simón el coplero. Vive de pueblo en pueblo animando fiestas. Le gustan los juegos de azar, las peleas de gallos y todo aquello que tenga que ver con las juergas, sobre todo "empinar el codo", como se dice popularmente. Está deprimido, tomando más de la cuenta. Siente que tiene motivos: su mujer, el amor de su vida se ha ido para siempre... Y para colmo se le escapó la cacería en el río...
Narciso también es de Sabana, siempre ha vivido allí. Enamorado de Meche nunca fue correspondido, ya que está desconfiaba de él, lo consideraba chismoso, intrigante e hipócrita (para completar el trío). Es charlatán, conoce a todos en el pueblo... Y todos "lo conocen". No se sabe de oficio alguno que desempeñe, aunque dice hacer de todo. Cuando alguien quiere contratarlo alega siempre estar haciendo algún otro "trabajito".
Simón y Narciso hacen que conversan y comparten. Mientras el primero habla y bebe, el otro bebe, se prepara algo en la cocina y curiosea por toda la casa.
— o —
–Amiga, ahora viene lo bueno: en una de esas salidas me percato que escondido entre las ramas alguien me observa. Estuve a punto de salir corriendo, pero fue cuando me llegó el chispazo y empecé a nadar hacia donde sabía que estaban los caimanes.
–¡Qué miedo!
–Tranquila. No soy tan pendeja... Me fijo entonces que el tipo se levanta de pronto, nervioso y asustado, resultando ser Narciso un vecino y amigo de mi esposo. Entonces sale corriendo hacia el pueblo… De inmediato intuí hacia donde iba y a qué… Lo que me da tiempo a seguir con mi ocurrencia sin saber cómo terminaría...
–¡Ah tipo pa' sinvergüenza!... ¿Y qué hiciste?
–Segura de que no había más nadie salgo por entre unos árboles. Me iba a devolver para recoger la ropa, pero lo pensé mejor: dejarla.
–Se escucha divertido.
–Me fui muy nerviosa. ¿Te imaginas?: desnuda y corriendo por el monte.
–Divertido, sí... Lo imagino.
– Por suerte no me topé con nadie. Llegué hasta la casa de una de mis vecinas que a esas horas no se encuentra y agarré uno de sus vestidos tendidos al sol...
–Todavía lo estará buscando –Y suelta una deliciosa carcajada.
–Me lo puse y salía a toda prisa. Ya en la autopista, en la vía que no sale del pueblo, empecé a pedir aventón, o cola como se dice en mi país... Pasaron varios carros hasta que se detuvo un camión de cargas y me monté. El chofer iba solo, era atacón y galante, pero respetuoso. Rodamos como cuatro horas hasta llegar al pueblo más cercano a la frontera... Y ya ves... Aquí estoy.

Enviado al Concurso Relatos Cortos Sinergias Servicio Editorial. 1ra. Edición. (España). (2018). Incluido en la Antología de Relatos:Sinergias.

jueves, 14 de junio de 2018

LA BRISA


Brisa que con el viento
     hace caer las hojas.
Brisa que viene y se aleja.
El primer frescor…
     ¿Lo es todavía…?
Cielo despejado… y en un instante
     árboles en rítmico vaivén.
Constante el soplar
     refresca el rostro
         desde la lejanía…
Siento la brisa y recuerdo
     que no había ilusiones ni esperanzas
         ni sueños compartidos…
Siempre una sonrisa…
Brisa que se aleja del paisaje
     transformándose en la distancia
          fresca cual esparcía
              el aroma de las flores…
Sin promesas
     se disolvieron las ilusiones…
Mis pensamientos se aceleran,
     se manifiestan mis emociones,
     y me lleno de nostalgia
         cuando me alcanza la brisa.

miércoles, 22 de noviembre de 2017

LA PALABRA COMO VÍNCULO DE LA HUMANIDAD


Hay quienes afirman que el idioma español es difícil, sobre todo quienes no lo hablan ni lo escriben.


Para la palabra "colar", utilizamos "colador", pero no se "cola" el café, sino se "cuela". Lo mismo ocurre con "moler"... ¿Tendrá que ver el café con que no se "mole"?

Somos del planeta Tierra, deberíamos ser "tierrícolas", así como los de la Luna son "lunáticos" y los del Sol "solariegos", pero no, somos terrícolas... ¡Ah! ¿Y los del Marte? No son "marteanos", sino marcianos como si fueran de "Marce"… Eso lo dejo para que los estudiosos expliquen (de paso lo hacen)... Bueno, para eso son estudiosos.

23 de noviembre "del" 2017, "Día de la palabra como vínculo de la humanidad"... Algunos jugamos con ella de manera consciente o ignorante. Son muchos los que "ahora" dan su aporte más que "antes". Y digo "antes" por las limitaciones que han disminuido: quienes leían y escribían eran menos (en cantidad), pero "ahora" en internet se ha ampliado el espectro, tenemos redes sociales y blogs como sus mejores aportes.

Vaya un saludo a los que utilizamos la palabra. Con ella somos creadores de la nada... como aquel... "En el principio era la Palabra, y la Palabra estaba con Dios, la Palabra era Dios. Todas las cosas por medio de la Palabra fueron hechas y sin ella nada de lo que ha sido hecho fue hecho. En la Palabra está la vida, y la vida era la luz de los hombres".

Remitido a la Fundación César Egido Serrano – Museo de la Palabra con motivo de celebrarse el 23 de noviembre el Día de la palabra como vínculo de la humanidad.

miércoles, 26 de octubre de 2016

EN EL CENTRO COMERCIAL

No soy fanático de los centros comerciales, ni puedo negar que me gusta visitarlos: comprar algo, comer en la feria, ver algún film, encontrarme con…
Ayer estuve en uno (en buena compañía). Nuestros sentidos se dieron banquete, aunque no todos: los olores de los negocios de comida, las imágenes de las vidrieras y aparadores, el subir y bajar las escaleras mecánicas…
¡Un día diferente!

NO BASTA SABER LEER

Mientras esperaba entrar al negocio que tenía harina de maíz (sólo dos por persona), de esas que se consiguen gracias a la empresa privada, me vi en la urgencia de una necesidad. Busqué un baño y me topé con un letrero. Al no encontrarlo pregunté al vigilante y este me informó que me había equivocado, lo que refuté mostrándole el aviso que dice: "Ruta de evacuación"...

miércoles, 28 de octubre de 2015

JAQUELINE DE LOS RÍOS

Enviado al IV Concurso Internacional de Microrrelatos
Museo de la Palabra (Nov. 2014).

Ella es una moderna musa convertida en poesía. Hace milenios que escribe su historia con palabras de colores y símbolos que entonan melodías que mueven las nubes y aclaran los días lluviosos, mientras sus frases dan vida a los afluentes del mar de la escritura.
Un día el templo de la prosa le cerró las puertas, pero no por despreciarla, sino para que no dejara al mundo sin la belleza de su arte. Sabios los dioses la coronaron con las espigas del triunfo y hoy su brillo forma parte de las constelaciones que los antiguos iniciaron.

EL PERRITO

Enviado al IV Concurso Internacional deMicrorrelatos
Museo de la Palabra (Nov. 2014).

El cachorrito es juguetón y olfatea los rincones de la calle donde fue abandonado, dejando de ser “perrito de raza” para convertirse en “perro callejero”.
Una pareja con dos hijos (un militar viviendo en otra ciudad y una hija casada con un ruso, residenciados en Estados Unidos) camina en busca de pan.
Hace tiempo dejé de verlos, pero conozco sus historias porque yo las escribí…
Cierto día la señora salió como de costumbre, topándose con el cachorro e ignorándolo al pasarle por un lado… Transcurrido algunos días el cachorrito la saca todas las tardes a pasear.

lunes, 23 de febrero de 2015

VENCEDOR

Enviado al III Concurso Internacional de Microrrelatos
Museo de la Palabra (Sept. 2012):

Sir Alberto de Catia, Lord de Altavista y San Pedro… ¿Qué me diferencia? Que tuve padres. Por generaciones lideramos batallas ganadoras (o no estaría por estos lares). Por generaciones la Flor de Cayena el símbolo oculto descubierto.

Salido al campo, resultado victorioso. Unido a las redes en telarañas conocido. En las ondas navegando con éxito.

Rodeado y cercado por amigos los enfrenté con valor y arrogancia. Sin ser jinete ni contar con caballo famoso… pero no hay pero que valga… banderín al ristre cabalgué al oriente.

Hoy vencedor descanso y me preparo para el próximo festejo.


MIRADA

Enviado al Concurso Internacional de Microrrelatos 
Museo de la Palabra (Sept. 2012):

Ella es una deportista muy bella. Corre por las calles de mi ciudad aun con pies convalecientes. Ganadora y no-ganadora, pero participante. Mucho ánimo y carisma.

Le gusta el mango y la buena mesa. No teme a los ratones y le asquean las cucarachas.

Hoy la he visto transitar por su acera. Un caminar de vaivén que va y viene. Me ha sonreído, le respondo y continuamos nuestros destinos.

En la distancia me giro para mirarla. Ella en la misma distancia continúa indiferente… le vuelvo a sonreír…

lunes, 4 de agosto de 2014

AGUA Y BAILE


En las fiestas de adultos cuando hay niños estos juegan y corren hasta cansarse. Se atraviesan entre las parejas que bailan. Van a la mesa donde pueden tomar refrescos o alguna otra cosa: dulces, pasapalos… mejor, sólo dulces… Juegan a las persecuciones sin preocuparse por sus padres… Bueno, hasta que los ven bailando. Allí comienza el drama, principalmente cuando se involucra “Edipo”. El bendito muchacho se cuelga de la ropa, le abraza una pierna (a veces hasta las dos), llora… y algunos hasta patalean.

Conozco al amigo de un amigo al cual el hijo de su hijo le hace esas mismas jugarretas, menos la última. En cada fiesta era el mismo espectáculo… hasta que dieron con una solución mágica, y diversión para el muchachito: sentarlo por ahí, darle dos vasos con agua, para que pasando el líquido del uno al otro el también pasará el rato. Esos momentos, ellos, los padres, los aprovechaban para “echar un pie”…

Todas esas cosas que de niño se realizan quedan como aprendizaje, por eso de allí los beneficios de los juegos infantiles…

Termino este cuento que me contó el amigo de un amigo que le ocurría al hijo de un hijo suyo y me voy a la cocina a mezclar una limonada utilizando dos vasos…

jueves, 26 de diciembre de 2013

PERLA BRILLANTE

Lo he dicho antes y me provoca repetirlo: ninguna autopista ni camino es obstáculo para que yo vaya a donde quiero, sea presente o diferente, aquí o diferente. Sólo tengo que vestirme, ir a uno de mis establos y dejar que vuele mi cabalgadura.

Por una extraña razón que, por supuesto, no me es extraña me tocó transitar entre las nubes del tiempo, y por cierta lógica, del espacio. No puedo definir la época, pero sé que muchos hombres volcaban su espíritu hacia el dios de su preferencia: Marte, Yahvé, Zeus, Venus o Magdalena…

Mi momento no pudo ser el más oportuno: el nacimiento de una que en el futuro muy lejano (para ella) sería la luz de un amanecer, la estrella de fuerte brillo que desde el norte guiaría a los viajantes. Desde ese momento y por siempre su belleza sería poco común, una perla entre las joyas… Con el correr de los años tendría su propio templo e inspiraría poemas, sueños e ilusiones.

El ambiente era de fiesta en donde los dioses danzaban de alegría, felicidad y envidia algunos (solamente algunos). Los mortales también celebraban y desde ese momento erigieron el antes templo…

Era el instante de regresar. Volví a mi cabalgadura. El tiempo y el espacio formaron de nuevo parte de mi entorno. Cerré los ojos y al abrirlos… de nuevo en mi presente.


Salí y me quedé mirando el cielo de infinitas estrellas y brillante luna que dejaban una huella más en mis excitados pensamientos.

miércoles, 16 de octubre de 2013

MIS TÍOS


Dedicado a ellos. Carmen, Rafael, Jorge, Gloria, Carmen y Cruz.
Agustín, Matilde, Martha, Antonio, Luis y Polo.

Mis tíos son seis… (Cierto, mi mamá no cuenta como tía)… Todos conocidos, primeramente a mi mamá. Luego ellos a mí, aunque no sé en qué orden. A todos los recuerdo con mucho cariño, ha sido un disfrute a través del tiempo.

La de los constantes granos negros en las comidas y sus “amenazas” de guindarme en el techo por alguna travesura.

El que convivió con nosotros. Con su sonrisa especial y su voz pausada. Fiel a sus visitas.

El alto de hablar pausado, siempre elegante en los momentos especiales. Pendiente de la unión familiar.

La que participaba en el “desorden” y de exquisita cocina. Siempre cercana.

La “maraca”. La que me corretea cuando la capturo con la maquinita de tomar fotos. Siempre pendiente.

Como dije antes, diez tíos, pues con mucho orgullo cuento a las parejas que les conocí, esas a las que no le di calificativos, pero sí el sentimiento, el cariño y el aprecio que compartimos. Conmigo ellos siguen estando presentes en cada pensamiento y en cada actuación.

viernes, 11 de octubre de 2013

EL HOGAR DE MIS ABUELOS


El viaje duraba un día o unas horas. La estadía siempre fue placentera, bueno, salvo cuando enfermé. Conservo hermosos recuerdos. Para empezar, mis abuelos siempre se alegraban al recibirnos: tenían la calidez de mis abuelos. Su casa con paredes de bahareque y techo de tejas, sencilla con el taburete en la entrada. El terreno con la cerca delimitadora adornada con ramas y hojas de esas matas que eran ramas y hojas.

El gran árbol y la canal con apenas su telita de agua nos indicaban que habíamos llegado. Canal que venía desde el viejo embalse y telita de agua que podía apreciar una vez que me acercaba a su borde.

La pequeña puerta de tablas, tal vez sólo para que no escaparan las gallinas. Los caminos y el tanque pequeño donde una de mis hermanitas compartió con nosotros su susto al caer en él. La banqueta en el recibo, en ambiente con la cocina y su fogón de leñas, las que subíamos a buscar entre las matas del fondo, esas mismas que nos ocultaban cuando requeríamos de un espacio para satisfacer ciertas necesidades del organismo.

Era una casa inmensa a mis ojos de niño que cada año en vacaciones visitaba con mi mamá… hoy no existe… Tras la puerta la cama ocupando el mayor espacio. Siguiendo el pasillo de tierra la habitación del abuelo. Al lado la de los santos flanqueados por la pequeña ventana; y al lado el cuarto del baúl también con su pequeña ventana.

En el patio trasero las matas de jobo y el tanque grande recolector de las aguas para la cocina y la sed.

En las mañanas, tempranito, estaba lista la avena y la cuchara con aquel gran orificio en su mango para más tarde la arepa con queso y mantequilla… ¡Ummm…! Después bajar al mercado en aquellas camionetas con sus laterales de madera a comprar el pescado para el sancocho y la cena. Las tardes para el juego, el recorrido y el aseo en el tanque grande… La noche, por ser las fiestas de la Virgen del Valle, para caminar por la plaza, visitar la iglesia, bailar en los clubes (¡ojo!, esto para los adultos mientras de niño tomar refresco y corretear) y divertirse en el parque mecánico…

Todo antes de regresar a Caracas… Nostalgia por aquella época en el Valle del Espíritu Santo en la isla de Margarita en el hermoso hogar de Elvira, Fermín y Ramón, (Ramón, primo convertido en hermano al venirse con nosotros), hogar con techo de tejas y paredes de bahareque.

jueves, 15 de agosto de 2013

ELLA ES TODA UNA DAMA

Teníamos unos treinta años. Ella era toda una dama: me pagaba el paisaje, me cedía el asiento, me permitía pasar de primero, me brindaba el café…

Era agradable caminar bajo la lluvia. Mi impermeable alargado y mi paraguas me protegían del agua, mientras ella caminaba a mi lado.

Recuerdo con mucho cariño la ocasión en que cómodamente sentado yo miraba pasar los otros vehículos y ella estuvo a punto de caer debido a un brusco frenazo. Ese día le aconsejé que no continuara viajando de pies.

Otro momento grato fue aquel en el que levantándonos muy de madrugada y en el que ella faltando a su trabajo fue hasta el registro público a hacer la cola para que a media mañana cuando yo llegara no tuviera que esperar demasiado.


En una de nuestras conversas, de esas en las que se habla de vida en pareja, matrimonio, etc. me dijo que desconocía lo que se ha dado en llamar los oficios del hogar. Le comenté que a pesar de su importancia no era relevante para un acuerdo, que se podía contratar a alguien para que le enseñara… es una dama y desde ese momento no he vuelto a saber de ella…

miércoles, 31 de julio de 2013

SABES, HECHOS POSIBLES

Dijo el árbol al ave ausente que una vez voló entre su ramaje:

Es posible que nada signifique para ti de cuando un tiempo compartimos sol, viento y estrellas.

Es posible que a tu partida dejaras de recordar las tonalidades verdes de mis hojas.

Es posible que alguna corteza trajera a tu memoria un pensamiento grato que al instante se alejara como la sonrisa que tal vez esbozaste.

Pero es un hecho que aún recuerdo la brisa, la luz y la sombra que nos cubrieron.

Es un hecho que las tonalidades de mis hojas están asociadas a tu canto y a tu plumaje.

Es un hecho que son muchos los momentos gratos que me hacen sonreír y reír desde que una vez conmigo anidaste.

Sabes. Son un hecho mis dos estaciones de flores, de viento, de luz y de luna que vivo comparto.

Sabes. Es un hecho que el bosque que habito no tiene cuatro estaciones. Invierno y primavera son infinitos.

Sabes. Son un hecho que algunas cosas sean posibles…

El árbol continuaba mostrándose majestuoso...

miércoles, 26 de junio de 2013

COLOR DE NOCHE NUEVA

Por supuesto que ella sola no va a andar por ahí atrayendo la mirada... Detrás de ella otras prendas de noche nueva o de fresa madura que en su ausencia dejan volar la imaginación... Y muy dentro de ellas quien les da vida y razón de ser...

Se ajustan a sus formas y resalta su figura, mientras el atardecer o la noche comienzan a nublar la mente, la montaña se convierte en poema y la luna llena es escoltada por infinitos luceros.

Ni aun el tiempo la desplaza. Ella está con su andar efímero y su deshacerse en el espacio sin desaparecer...

lunes, 3 de junio de 2013

CRIMEN DE SANGRE

Desde comienzos de la prehistoria se ha condenado el derramamiento de lo que se ha dado en llamar la “misma sangre”, sin embargo, son muchos los que han realizado actos tan cuestionados y hasta que aún lo hacen.

Dije “desde comienzos de la prehistoria” porque cuentan del que mató a su hermano por envidia, ya que el dios que adoraban tenía preferencias por el que llevó la peor parte. Una quijada de burro fue el arma homicida. El criminal fue descubierto sin muchas pesquisas, y aunque fue condenado anduvo libre el resto de su existencia (imagino que no era fácil colocar barrotes en los árboles). De acuerdo a las tradiciones eran cuatro habitantes, o sea, el crimen se ubicaba en un veinticinco por ciento de la población).

 Pero me salgo del tema…

Los comentarios vienen al caso porque he sido quien “ha derramado su propia sangre” y no es que me haya cortado o algo parecido…

Eran once y diecisiete de la noche (seguro de la hora porque un zancudo impertinente perturbó mi sueño con su “zumbar” y no pude evitar mirar el luminiscente reloj). Por lo demás todo silencioso.


Me levanté fui por un vaso de agua, volví y me acosté. Pronto a conciliar el sueño el zancudo regreso con el “zumbao”. No lo pelé: de un solo aplauso en mis manos quedaron las partes desmembradas de su cuerpo, así como la sangre que momentos antes “le done” Maté a quien tenía mi sangre.

jueves, 28 de marzo de 2013

UNA IDA AL PARNASO

Caminaba por los límites de mi castillo. La luz enceguecedora. El resplandor abarcó kilómetros, mas sólo yo lo percibí.
 
- Id en busca de Lady Jaqueline.
El mensaje claro me llevó a mis establos. En maravillosa cabalgadura con rumbo conocido… Días de andanza que en pocos minutos me trasladó a través del tiempo. Mensaje para una de las guerreras de la historia… Quedé prendado (siempre lo estuve). Era la libertadora del héroe, pero venida de mi presente.
 
- Id en su busca. La habréis de conocer porque es hermosa.
 
Las doncellas ocultan sus rostros tras abanicos, mientras ella en sencillo carruaje recorre los caminos. Los pueblos la aclaman y ella evidencia a los malvados que envían flores.
- Id. Su poesía inspira al valor y al miedo haciendo de ellos uno para acometer con ímpetu.
 
De los Ríos traerá a la luz a aquella señora para que todos sepan que el mesías de las tradiciones, como todo grande hombre, tenía a su dama (y no precisamente era su madre).
 
- Y venid. Colocad uno de sus bordados en vuestras riendas para que ondee al viento como las olas en playa intranquila.
De regreso en mi tranquilo corcel. No cuento con el mensaje entregado, mensaje que no me pertenece ni me pertenecía.
- Descansad de vuestra jornada, habéis cumplido.

miércoles, 27 de febrero de 2013

PAÍS DE FLORES

Un caminante que había paseado por diferentes miradores. Desde las alturas podía ir disfrutando del paisaje que brindaba mi ciudad.
 
Mi andar comenzó temprano, cuando el Sol llevaba casi medio camino andado. El cielo, a esas horas, azul, un poco despejado y con la brisa que acariciaba el rostro. A medida que ganaba en distancia y cansancio ganaba en alturas y descubrimientos.
 
Llegando en la tarde y cuando el horizonte anaranjizado, las luces, tus luces, se iban encendiendo, momento en el que por primera vez mis emociones, las verdaderas emociones brotaron. Allí me detuve entre hojas, matas, ramas, algunas flores y algún árbol que se proyectaba en su sombra.
 
Por largo tiempo esperé mientras más luces se aparecían una tras otras. Arriba otras también se unieron al coro de destellos que se adentraban en mi espíritu. Continúe la marcha con la seguridad del camino elegido y el placer del recorrido…
 
Han pasado muchos años y he vuelto a recorrer esos caminos. Son otros verdes, pero siempre verdes y nuevas sombras. Los miradores han cambiado de lugar sin moverse, aun cuando el sendero me lleva por los mismos caminos y las mismas horas. Desde mi nuevo horizonte continúo viendo a mi ciudad, mi hermosa ciudad, esa que muy pronto estando cerca estará a la distancia.

Me siguen emocionando esos destellos rojos que se desplazan raudos. Los titilares de antaño y los nuevos que la hacen más misteriosa, esos que en sus cerros siguen subiendo. Volteo y hoy es la luna la que se apodera del brillo de la noche.

miércoles, 13 de febrero de 2013

EL DÍA DE LOS ENAMORADOS


-    ¡Buenas tardes, señor…! Permítame… Pase adelante…

-    Oye, Marcos, ¿han llegado los otros?

-    ¡Oh, sí, señor! Sólo faltaba usted, y llegó puntual…

      …

-    ¡Señores, buenas tardes…! Comencemos…

-    Caballeros, mis ventas han bajado mucho en esta fecha. Ya no es como antes… ¿Qué está pasando?

-    Que la gente se está enamorando menos.

-    Pero tenemos que hacer algo al respecto.

-    Tengo una idea: cambiemos la definición.

-    ¿Cómo así?

-    No te preocupes, es fácil... Todos saben que ese día, el de san Valentín, es el día de los Enamorados, no es otro, y ha sido así desde mediados del siglo diecinueve… bueno, que desde ahora sea el día de los enamorados… y los amigos…

-    ¡Buena idea! Pero, ¿por qué no “el día del amor y la amistad”?

-    ¡Excelente!

-    ¡Fantástico! Así muchos tendrán una razón para regalar a alguien, ya sea por especial o por transmitir algo… O sea, más excusas, más ventas…

-    A partir de mañana empezaré a cambiar vitrina.

-    Transmitiré la información a las agencias de publicidad.

-    Bien, señores, nuestros negocios van a mejorar…

      …

-    ¿Ya se retira?

-    Sí, Marcos… ¡Ah! Por cierto. Siempre recuerda: el 14 de febrero es el día de los enamorados.

-    No lo entiendo, señor…

-    No importa, sólo recuerda lo que te acabo de decir.…

martes, 12 de febrero de 2013

CADA LIBRO ES UNA AVENTURA

La lectura es una acción agradable. Cada libro un suceso: vivimos, nos transportamos, viajamos por mundos y dimensiones. Cada uno es único, uno mismo es diferente en cada lector. Difiere en las etapas de nuestro transitar. Un libro leído veinte años ha es otro cuando volvemos a él…

Me ha ocurrido algo extraordinario. Una distancia considerable. Vinieron a mí, recuerdos. Experimenté una nueva aventura: sentado en un local de comida rápida (de esos en los que en largas colas y en seleccionar entre pocos menúes, pero incontables opciones se nos va parte del tiempo) he tomado uno de los morrales mientras los niños juegan en el parque. Al abrir uno de ellos (de los morrales, no de los niños) me he topado con una sorpresa…

Entre mis manos pasaron las hojas y con la mirada las páginas. Allí estaban las mismas oraciones, las mismas palabras. Otros significados: “mimo a mi mamá”, “papá lima la pala”, “chino”, “cacho”, “coche”…

Vuelvo a guardar el libro y dejo que mis emociones vivan su experiencia…

miércoles, 12 de diciembre de 2012

FIN DE SEMANA



Que he salido a cabalgar y recorrer un lindo pueblo montañoso. Debido a la estrechez de sus calles mi cabalgadura descansa en un establo de esos que se encargan de su cuidado. Sus habitantes viven del comercio, sobre todo de frutas, verduras y una que otra baratija.

Que me ha llamado la atención una gran cesta de durazno que se ven frescos y provocativos. Mas de momento he decidido no comprarlos, antes quiero recorrer y comparar. En cada puesto variedad y economía van parejos entre un local y otro. El paisaje hace placentero el paseo. Al fin he decidido por una de las cestas. La tomo entre las manos y me percato de su pesadez. A medida que avanzo en el regreso caigo en cuenta de lo mucho que camine y de como mi carga no es nada cómoda ni liviana. Reflexiono por el camino y me digo: ¿Cómo es posible que habiendo tantos lugares haya escogido el más lejano para adquirir tan delicioso manjar? Ahí mismo me doy la respuesta: folklórico…

Colocó de manera segura mi dulce cargamento, pago por el cuidado del caballo y me dispongo a partir. Justo en ese momento lo inesperado: comienza caer una pertinaz lluvia. Precavido cargo conmigo un paraguas… pero me niego a sacarlo, no quiero mojarlo.

Sigo cabalgando y disfrutando del hermoso paisaje, de valles, montañas, cielo y nubes que se encuentra a mi paso.